En el pensamiento colectivo está arraigada la idea que tenemos que encontrar, compartir o incluso comenzar a vivir algunas cosas sólo y siempre y cuando encontremos alguien con quien hacerlo.
Tenemos tan normalizada la parte de estar en una búsqueda constante de amor romántico que cuando no lo tenemos nos sentimos las personas más solitarias y miserables.
No niego que los humanos seamos seres sociales pero al mismo tiempo la idea de quedarnos solxs con nuestra cabeza nos aterra. Al menos a mí aún me da miedo estar mucho tiempo a solas.
He estado en este proceso de resignificar la soledad un tiempo, no negaré que hay días terribles que la nostalgia y deseo de tener a alguien que me acompañe románticamente me invaden al punto de quebrarme; hay otros días en los que disfruto de mi compañía y no queda tiempo para pensar en lo que pudo ser o podría estar siendo.
Creo que lo más “fácil” para mi cabeza sería seguir en esta búsqueda de conexión y atención constante pero no lo voy a hacer hasta que estar a solas conmigo resulte más cómodo que una tortura.
A lo que le pones tu atención le pones tu energía, quiero ponerme atención para poder pasar tiempo a solas increíble, hay días buenos y malos pero es un proceso que estoy dispuesta a seguir, el tiempo que sea necesario.
¿Tú qué haces en tu tiempo solas?
-cacho de humano
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